Una pasantía de investigación en la Facultad de Ingeniería Agrícola de la Universidad de Concepción realizó Ángel Sucasaca Canaza, alumno de la carrera de Ingeniería Agroindustrial de la Universidad Nacional del Altiplano (UNAP), de Puno, Perú.
Sucasaca trabajó en el Laboratorio de Propiedades Físicas de Biomateriales, que dirige el académico Pedro Melín Marín, quien detalló que el estudiante se adjudicó una beca para viajar a un laboratorio extranjero que le permitiera ganar experiencia para su trabajo de titulación, mediante una pasantía de un mes.
En la práctica, explicó el investigador, el estudiante pudo ensayar materiales similares a los que tiene en su país, porque su objetivo era poder entrenarse en la metodología de medición y análisis que luego tendrá que aplicar en Perú, como parte de su proyecto de titulación. “Él quiere desarrollar un producto en base a proteína de soya y el alga Cladophora crispata, conocida como llaska, que crece en el Lago Titicaca, para luego incorporarla en una hamburguesa vegetariana que, además, en vez de grasa animal va a usar aceite vegetal. Son innovaciones de procesos y de productos que permiten entrar a un nicho de alimentos más naturales”, acotó.
Gracias al trabajo de laboratorio, el estudiante puede ir caracterizando el producto a medida que lo elabora. “Cuando él hace uso del extrusor tiene que analizar cómo entra la materia prima y cómo sale, midiendo distintos parámetros, como, por ejemplo, la humedad, color, actividad de agua, densidad, textura, entre otros; para luego, en base a eso, poder evaluar cuál es el procedimiento más apropiado que le permita obtener el mejor producto. Y la forma como se evalúa es mediante análisis físicos, químicos, microbiológicos y organolépticos”, manifestó el académico del Departamento de Agroindustrias.
Subrayó que el laboratorio que dirige cuenta con equipos adecuados. “Tenemos métodos de evaluación física como densidad, densidad real y densidad aparente para distintos materiales; viscosidad para el caso de los fluidos; equipos de medición de actividad de agua; la máquina de pruebas universal Instron, para medir la condición del material antes y después de haberse extruido; y con esos datos discriminar entre tratamientos más y menos adecuados”, entre otros, detalló.
VINCULACIÓN INTERNACIONAL
Pedro Melín destacó el programa de internacionalización de la Universidad de Concepción, que promueve la movilidad estudiantil “y se está desarrollando con bastante fuerza”, lo que se traduce, por ejemplo, en pasantías de investigación en el pregrado, como es el caso de Sucasaca. “El hecho que vengan estudiantes extranjeros y vean las capacidades de análisis, en términos del equipamiento y cuerpo académico, que apoyan el desarrollo de productos, pone de manifiesto que el nivel con el que se trabaja en nuestra Facultad es de frontera”, resaltó el profesor.
El académico hizo hincapié en los vínculos con la UNAP y recordó que hace 22 años, un ingeniero agroindustrial de esa universidad, Wenceslao Medina, cursó su magíster en la Facultad de Ingeniería Agrícola y trabajó en el laboratorio que dirige. “Hoy es profesor de la UNAP y, conociendo las facilidades que tenemos acá, incentiva a los alumnos a venir con la confianza de que vendrán a aprender”, cerró.
Por su parte, Ángel Sucasaca, explicó que su proyecto de tesis busca “generar un texturizado a partir de proteína de soya, pero sustituyéndola parcialmente con harina de llaska”, que se presenta como una importante fuente de nutrientes, sin embargo, sostuvo que “actualmente, la llaska ya no se aprovecha como un recurso alimenticio”.
El estudiante manifestó que escogió FIAUdeC “para conocer cómo se trabaja en investigación, los laboratorios, los equipos, además, tengo compañeros y profesores que han venido acá, que han hecho posgrados, por lo que tenía buenas referencias de la Universidad de Concepción. Y mi intención es volver a Chillán más adelante a cursar el Magíster en Ingeniería Agrícola con mención en Agroindustrias”.