El académico Álvaro Ferrada participó de la jura de ovinos, en la XVII Exposición Ovina o Fiesta de la Esquila que se desarrolla en la comuna de Pinto, Región de Ñuble.
En la comuna de Pinto se realizó recientemente la XVII versión de la Exposición Ovina, también conocida como la Fiesta de la Esquila, donde, además del ganado, se disfruta del asado de “Cordero Pinteño”, demostraciones y competencias de esquila de ovejas, artesanía de la zona, espectáculos folclóricos y culturales.
En esta actividad se reúnen diversos productores y personas de varios lugares de la provincia, para mostrar los mejores animales que generan carne ovina del campo chileno, pero también para conservar esta tradición.
En la oportunidad estuvo presente el académico del Departamento de Producción Animal, de la Facultad de Agronomía, Álvaro Ferrada Ringele, quien explicó las características de la feria. “Está dedicada principalmente al ovino de características carniceras, típico de nuestra Provincia y Región. Se exponen los más destacados sementales de raza Suffolk Down, así como también hembras reproductoras junto a sus corderos. Estos últimos conocido en esta zona como “Cordero Pinteño”, de gran calidad carnicera y características que permiten que se obtengan variados cortes carniceros y gourmet que se destinan a los más prestigiosos y exigentes mercados y consumidores nacionales. La comuna de Pinto es una típica comuna cordillerana, donde su ganadería aprovecha las praderas naturales y sembradas, destacando su condición y el traspaso de esas características a los animales que de ellas se alimentan”.
Cabe destacar que la jura de los ovinos en esta exposición fue realizada por el académico, especialista Ovino y Caprino, quien fue invitado por la Municipalidad de Pinto, a través del programa Prodesal, para iniciar las actividades ganaderas con la jura de las diferentes categorías ovinas en exposición.
Complementariamente, en esta actividad el académico traspasó información técnica a los productores, para mejorar el nivel de los ejemplares para las próxima temporada, así como también mejorar la calidad del rebaño a través de los sementales y reproductoras seleccionadas como ganadoras. “Esto les permite complementar lo teórico y ponerlo en práctica, así como conocer el entorno productivo de nuestra zona de influencia, los productores y el quehacer de los profesionales que ahí ejercen”, puntualizó el experto.